notas de prensa

Madrid, 21 de septiembre de 2008| Ante la nueva ofensiva feminista y progresista que niega la vida a nasciturus, ancianos, enfermos e incapacitados, el Frente Nacional se posiciona sin resquicios a favor de los más débiles, inocentes e indefensos y denuncia los intereses de poder, ideológicos y económicos que fomentan esta nueva forma de genocidio legal.

A su vez, el Frente Nacional es consciente de la importancia de no perderse en divagaciones, que han demostrado no evitar la legalización del aborto, la eutanasia y el suicidio asistido; por ello, buscando soluciones concretas cercanas a la población, una comisión de miembros del Frente Nacional ha concretado una serie de fundamentadas medidas a tomar por esta organización, de las cuales extraemos las siguientes:

· Apoyar activamente a los candidatos a la presidencia del Colegio Médico que se hayan expresado a favor de la vida.

· Habilitar los medios para hacer accesible al personal médico y sanitario la declaración de objeción de conciencia, evitando así que se sientan solos y desamparados por su valiente decisión.

· Mostrar nuestra cercanía a los médicos que con la legalización de la eutanasia se vería abocados a practicarla con la intención de que ellos y el personal sanitario cuenten con los medios suficientes como para comprender el alcance efectivo y valioso de la Medicina Paliativa cuyos principios están incluidos en el juramento hipocrático médico.

· Realizar campañas publicitarias de concienciación que sean atractivas y no agresivas en el sentido marcado por los expertos que han analizado la poca efectividad del habitual mensaje pro-vida y que han concluido destacando la necesidad de conectar con el problema de las madres en situación de embarazo no deseado, de los enfermos terminales y de sus familias, o de los ancianos dependientes y de quienes les cuidan.

Con esta base, el Frente Nacional subrayará el apoyo a las mujeres, enfermos, ancianos y dependientes; indicará los graves efectos secundarios de someterse a un aborto; mostrará su comprensión ante las dificultades emocionales, económicas, psicológicas, familiares, etc. por las que atraviesan estas personas, y, finalmente, procurará destacar la admiración que merecen las mujeres que llevan a término su embarazo a pesar de las dificultades.

Si podemos ayudar a que el pueblo español recapacite habremos hecho mucho para apartar de nuestra cultura la mentalidad destructora de vida como forma de evitar problemas.